A riesgo de parecer demasiado pesado e incluso resultar aburrido y poco original, no me cansaré de mostrar una y otra vez a aquellos que no hacen caso de las normas en un asunto tan serio como el de los accidentes laborales. Luego llegan los percances, las críticas y los lamentos, pero muchos se podrían evitar en origen, haciendo las cosas bien desde el principio. En la imagen, aunque no lo parezca, la hormigonera está en movimiento, colgada de una gran grúa, junto al operario sin casco.
L. W.